FISC – Persiste el desafío de pasar de una alfabetización inicial a una visión y una oferta educativa amplia que incluya la enseñanza, a la vez que reconozca y valide los aprendizajes hechos por las personas no solamente en la edad adulta sino a lo largo y ancho de la vida: en la familia, en la comunidad, en el trabajo, a través de los medios masivos, en la participación social, en el ejercicio mismo de la ciudadanía. Septiembre 2009

CONSIDERACIONES GENERALES

“De la alfabetización al aprendizaje a lo largo de toda la vida” es el gran desafío al que nos convoca esta conferencia regional.

En otras palabras, el desafío de pasar de una alfabetización inicial – que es como continúa entendiéndose la alfabetización de personas jóvenes y adultas en muchos países de la región – a una visión y una oferta educativa amplia que incluya la enseñanza, a la vez que reconozca y valide los aprendizajes hechos por las personas no solamente en la edad adulta sino a lo largo y ancho de la vida: en la familia, en la comunidad, en el trabajo, a través de los medios masivos, en la participación social, en el ejercicio mismo de la ciudadanía.

La educación es un derecho fundamental, una llave que permite el acceso a los derechos humanos básicos, tales como salud, vivienda, trabajo, y participación, entre otros, posibilitando además el cumplimiento de las agendas globales, regionales y locales de desarrollo.

Esto implica reconocer que estamos ante un paradigma que concibe al ser humano como sujeto de la educación, poseedor de saberes singulares y fundamentales, creador de cultura, protagonistas de la historia, capaz de producir los cambios urgentes y necesarios para la construcción de una sociedad mas justa.

Una concepción que contempla no sólo la educación formal sino que incorpora y revaloriza la educación no formal y popular, y supera la visión individualista del aprendizaje al proponer una construcción social del conocimiento en comunidades de aprendizaje que propicien el encuentro intercultural, intergeneracional e intersectorial, y la protección del medio ambiente.

En esta perspectiva, la alfabetización es un punto de partida, necesario pero no suficiente, para que cada sujeto en el siglo XXI pueda continuar y complementar sus aprendizajes a lo largo de toda la vida y ejercer así sus derechos ciudadanos.

LA ESPECIFICIDAD Y HETEROGENEIDAD DE ESTA REGION

América Latina y el Caribe es una región con grandes especificidades y sumamente heterogénea, formada por 41 países y territorios, en la que se hablan cerca de 600 lenguas, con realidades muy diversas en todos los sentidos, incluido el educativo y el de la educación de personas jóvenes y adultas (EPJA) específicamente. Esta diversidad entre países y dentro de cada país exige cautela al momento de las generalizaciones y un gran esfuerzo de diversificación, elaboración y mejoramiento de políticas y programas adecuándolos a contextos y grupos específicos, teniendo en cuenta entre otras diferencias, la edad, género, raza, zona, lenguas, capacidades diferentes y culturas.

Esta es también, la región más inequitativa del mundo, con 71 millones de personas viviendo en la indigencia y cerca de 200 millones de pobres. Exclusión educativa y exclusión política, económica y social son todas ellas caras de la misma moneda. La EPJA se ubica justamente en esta problemática, entendiendo que la educación es una herramienta fundamental para luchar contra la pobreza y la exclusión social, pero también la imposibilidad de resolver dicha problemática exclusivamente desde el campo educativo, en ausencia de cambios estructurales y sin la convergencia de otras políticas.

Los diversos contextos socioeconómicos, étnicos y culturales de la región, plantean cada vez más obstáculos a la alfabetización y otras formas de aprendizajes entre jóvenes y adultos. Entre estos factores figuran el desempleo, la exclusión social, las comunicaciones, las migraciones, la violencia, las disparidades entre hombres y mujeres, todos ellos vinculados en gran medida a la pobreza estructural. Esto se ha visto agravado en los últimos tiempos por la crisis alimentaría, la crisis energética y cambio climático.

AVANCES

En los últimos años, la EPJA ha cobrado renovado impulso en la región, después de un período de receso en los 90´s, tanto por parte de gobiernos como de organismos internacionales. Se han dado avances significativos en el plano legal y de las políticas en la mayoría de países, en términos del reconocimiento del derecho a la educación así como de la diversidad lingüística y cultural de estas naciones. En particular, se han reactivado en las agendas nacionales e internacionales los planes, programas y campañas de alfabetización en la mayoría de países. Se han institucionalizado asimismo ofertas de completación y certificación de estudios de educación primaria, y secundaria para jóvenes y adultos, en algunos casos vinculados a programas de capacitación y formación para el trabajo.

La oferta educativa no-formal se ha ampliado considerablemente, cubriendo tópicos muy diversos vinculados a derechos, ciudadanía, salud, violencia intrafamiliar, VIH/SIDA, protección del medio ambiente, desarrollo local, economía social y solidaria, etc. En algunos países se han logrado avances en la paridad de género. También ha empezado a tener visibilidad la atención a grupos especiales como migrantes y personas en contextos de encierro. Los medios audiovisuales y el uso de las TICs han penetrado en el campo de la EPJA, en algunos casos a partir de inversiones e intervenciones gubernamentales y de cooperación internacional.

En unos pocos países, la EPJA ha logrado avances importantes en términos de la construcción de sistemas de información, documentación, monitoreo y evaluación de los programas. También ha habido, en los últimos años, un impulso a la investigación tanto nacional como regional. La cooperación Sur-Sur se ha activado en muchos de estos ámbitos con iniciativas regionales y subregionales de diversa índole.

DESAFIOS

No obstante, cada uno de esos avances presenta al mismo tiempo nuevos y viejos desafíos. Continúa siendo grande la distancia entre lo normado en leyes y políticas y lo efectivamente realizado, planteándose la necesidad de una construcción más participativa de las políticas y de su vigilancia social por parte de la ciudadanía y por parte de los sujetos de la EPJA específicamente.

Las coberturas de los programas, gubernamentales y no gubernamentales, sigue siendo en general limitada para las necesidades y la demanda efectiva, y continúa marginando a las poblaciones rurales, indígenas y afrodescendientes[2], migrantes, personas en contextos de encierro y con necesidades educativas especiales, manteniendo o incluso profundizando la brecha antes que reduciéndola.

La estrategia de integrar en una misma denominación a jóvenes y adultos, no puede hacer perder de vista la especificidad y los desafíos de cada grupo etáreo, considerando que los y las jóvenes en la región son un grupo mayoritario. Asimismo, se viene priorizando la oferta educativa para ciertos segmentos de edad, por lo general hasta los 35 ó 40 años, dejando fuera a la población de mayor edad, negando así su derecho a la educación y contrariando la propia adopción del paradigma del aprendizaje a lo largo de toda la vida.

La diversificación y descentralización de la oferta educativa requiere de coordinación y articulación entre los diversos actores: gobiernos nacionales y locales, sociedad civil, sindicatos, iglesias, empresa privada, organismos internacionales, entre otros.

La paridad de género, en varios países se viene planteando como una necesidad, que afecta particularmente a las mujeres de poblaciones indígenas y a los niños/hombres del Caribe anglófono, desde la educación inicial hasta la universitaria y también para el campo de la EPJA, exigiendo políticas y estrategias de acción positiva.

Falta aprovechar mejor, con mayor sensibilidad y con espíritu comunitario, las nuevas tecnologías para fines educativos, y aprender de las lecciones prácticas que va dejando la experiencia en los países que han hecho incursiones pioneras en este terreno. También es preciso avanzar en términos de monitoreo y evaluación, especialmente en lo que hace a evaluación de aprendizajes, así como divulgar más y aprovechar mejor los resultados de investigación ya existentes, tanto para alimentar la política como para mejorar la práctica.

Permanecen como problemas pendientes entre otros: el subfinanciamiento crónico de la educación de personas jóvenes y adultas, su gran vulnerabilidad en términos de participación, institucionalización y continuidad de políticas y programas.

Asimismo, es necesario prestar especial atención a la formación de educadores y a la investigación para la EPJA, en un marco pedagógico-didáctico que permita atender a contextos y a la especificidad del campo, apoyándose para ello en las universidades.

Desde el punto de vista de su coherencia con la equidad, es necesario revertir las actuales tendencias, dando prioridad y atención con calidad y pertinencia a las zonas, sectores y grupos más desaventajados, como son en esta región las poblaciones rurales, migrantes, indígenas, afrodescendientes y personas en contextos de encierro y personas con necesidades educativas especiales.

ESTRATEGIAS Y RECOMENDACIONES

Reconocer que la realización plena del derecho humano a la educación de personas jóvenes y adultas está condicionada a la implementación de políticas de superación de las profundas desigualdades económicas y sociales de los países y de la región.

POLÌTICAS

1. Reconocer la EPJA como un derecho humano y ciudadano que implica mayor compromiso y voluntad política de los gobiernos nacionales y locales, en la creación y fortalecimiento de ofertas de aprendizajes de calidad a lo largo de toda la vida, asegurando que la EPJA desarrolle políticas orientadas a reconocer derechos de diversidad cultural, lingüística, racial, étnica, de género, e incluya programas que se articulen con la formación para el trabajo decente, la ciudadanía activa (DDHH) y la paz, de manera que se fortalezca y promueva el empoderamiento de las comunidades.

2. Promover políticas y legislación que integren la EPJA en los sistemas de educación pública y garantizar su aplicación, estimulando cambios en las estructuras que las hagan más flexibles, promuevan la adecuación de las normativas, con de la creación de observatorios ciudadanos de seguimiento de las políticas y uso de recursos.

3. Construir mecanismos de coordinación a nivel nacional que ayuden a establecer una política integral para promover un trabajo intersectorial e interinstitucional, que articule las acciones del estado con la sociedad civil (movimiento social organizado, iglesia, sindicatos, empresarios, entre otros) y posibilite un abordaje holístico, así como el seguimiento y control social.

4. Hay que seguir buscando enfoques que fortalezcan y garanticen el aprendizaje a lo largo de toda la vida, que incluye la alfabetización y la educación básica; el fomento a la lectura y la cultura escrita, para la creación de ambientes letrados, como diferentes herramientas para la superación de la desigualdad y la pobreza en la región y de construcciones de desarrollo alternativas. En este sentido, la valoración de la educación popular y no formal es fundamental.

5. Elaborar políticas de formación inicial y permanente de educadores de personas jóvenes y adultas con la participación de las universidades, de los sistemas de enseñanza y de los movimientos sociales, para elevar la calidad de los procesos educativos y asegurar el mejoramiento de condiciones laborales y profesionales de los educadores y funcionarios.

FINANCIAMIENTO

6. Recomendar porcentajes mas significativos de los presupuestos nacionales para la educación –al menos el 6% del PIB- y asegurar en el mismo, recursos específicos para la EPJA –Al menos el 3% del presupuesto educativo- que permitan ser ejecutados con transparencia, eficacia y eficiencia.

7. Asegurar recursos intersectoriales –nacionales e internacionales de origen público y privado- para planes, programas y proyectos de EPJA con perspectiva de género y reconocimiento de la diversidad, que posibiliten el desarrollo de políticas de acción positiva y financiar estudios que demuestren el costo social y económico, de la falta de nivel educativo en los países de la región.

HERRAMIENTAS

8. Desarrollar políticas de investigación y sistematización de experiencias educativas, promover la difusión del conocimiento, documentación y circulación de de las practicas relevantes de la EPJA. Fortalecer las redes Latinoamericanas y del Caribe de investigación en EPJA.

9. Desarrollar un sistema de evaluación, reporte, registro y monitoreo con parámetros internacionales que posibiliten la formulación de políticas a partir de la evaluación de los procesos, sistemas y métodos, que asegure la certificación, acreditación y homologación de los conocimientos y habilidades.

10. Impulsar de forma intersectorial e interinstitucional el diseño y elaboración de material escrito en lengua materna que refleje la diversidad de conocimiento de los pueblos.

INCLUSIÓN

11. Diseñar e implementar políticas educativas que favorezcan la inclusión, con equidad de género y calidad que contemplen, con un enfoque intercultural, las diferentes especificidades de todos los grupos poblacionales de los países de la región: indígenas, afrodescendientes, migrantes, poblaciones rurales y personas en contextos de encierro y con necesidades educativas especiales.

PARTICIPACIÓN

12. Fomentar mayor participación y cooperación entre la sociedad civil, los sectores privados y los distintos organismos del estado y en especial de los sujetos de la EPJA, mediante la promoción y fortalecimiento de la modalidad de la cooperación horizontal entre los países y fortalecer la cooperación internacional a favor de la EPJA.

13. Proponer que la UNESCO asuma un rol relevante y central en la garantía del derecho a la educación y en particular coordinar las metas establecidas en las conferencias internacionales y monitorear sus logros.

También ya se encuentran disponibles los siguientes documentos:

GUÍA PARA LA DISCUSIÓN Temas, tendencias y desafíos DESDE CONFINTEA V (1997), HACIA CONFINTEA VI (2009).

Power Point (documento de trabajo, para discusión).

Por mayor información dirigirse a: http://confinteavi.blogspot.com/

– La educación necesaria y las alfabetizaciones del Siglo XXI Leonardo Garnier / Ministro de Educación Pública Costa Rica Documento en Power Point.

Pin It on Pinterest